"Em el tiempo de los patriarcas, el valle del Jordán "...era tierra de regadío, como el jardín del Señor...". Gen 13:10
Una porción de la bella campina permaneció, con sus fuentes y torrientes vivificantes. Em este valle, rico de campos de cereales y bosque de palmeras y otros árboles frutíferos, las tribus de Israel habían acampado despues de cruzar el Jordán, y participaban por la primera vez de los frutos de la tierra prometida. Perante ellos se levantaban los muros de Jericó, baluarte pagano, el centro del culto de Astarote, la mas vil y mas degradante de todas las formas cananéas de idolatria.El Señor Dios entrego Jericó en la mano de Josué. Dijo a él para marchar en vuelta de la ciudad por seis dias. Em el séptimo dia marcharon siete veces llevando sempre adelante de la arca de la alianza: siete sacerdotes; llevando cada uno una corneta de cuerno de carnero, al cual tocarian. Quando diesen un toque largo todo el pueblo gritaria bien alto y la muralla de la ciudad de Jericó cairia. Y asi ocurrió y de esta ciudad solamente se salvó la prostituta Raabe y su família.
“En aquel tiempo, Josué hizo este juramento: Maldito sea en la presencia del Señor
el que se atreva a reconstruir esta ciudad! Que eche los cimientos a costa de la vida de su hijo mayor. Que ponga las puertas a costa de la vida de su hijo menor.” Josué 6:26
el que se atreva a reconstruir esta ciudad! Que eche los cimientos a costa de la vida de su hijo mayor. Que ponga las puertas a costa de la vida de su hijo menor.” Josué 6:26
“Cinco siglos se pasaron. El local permanecia desolado, maldecido de Dios. Hasta mismo los mananciales que habían hecho residencia em esta porción de la campina tan deseable, sofrieron los efectos causticantes de la maldición. Mas em los dias de la apostasia de Acabe, quando fué revivida la influencia del culto de Astarote por intermédio de Jezabel, Jericó, la antigua sede de ese culto, foi reconstruída, sin embargo al terríble precio para su reconstructor. Jiel, el betelita, ‘En tiempos de Acab, Jiel de Betel reconstruyó Jericó. Echó los cimientos al precio de la vida de Abirán, su hijo mayor, y puso las *puertas al precio de la vida de Segub, su hijo menor, según la palabra que el Señor había dado a conocer por medio de Josué hijo de Nun. I Reyes 16:34.”
“No muy distante de Jericó, em meio de bosques frutíferos, estaba una de las escuelas de los profetas; y para allá se dirigió Eliseo despues de la ascención de Elias. Durante su estadia entre ellos, los hombres de la ciudad vieron al profeta, e dijieron: " Señor, como usted puede ver, nuestra ciudad está bien ubicada, pero el agua es mala, y por eso la tierra ha quedado estéril. " 2 Reyes 2:19. La fuente que em los años anteriores habia sido pura e vivificante, y habia contribuído grandemente para suplir la ciudad y sus alrrededores com água, era ahora imprópia para uso.”
Jericó era una bella ciudad, entretanto, su pueblo era infeliz en virtud de la mala calidad de las águas pues eran: “águas que não prestavam e provocavam abortos”2 Reis 2:19.
Ocurre así em nuestros dias tambien: debido a pecados cometidos y a la maldición de la lei enveredamos por caminos de resentimento y busqueda de justicia por aquellos que nos hieren o cometen alguna supuesta "injusticia" contra nosotros. Las obras de la carne que el apóstol Pablo nos advierte: “idolatría y brujería; odio, discordia, celos, arrebatos de ira, rivalidades, disensiones, sectarismo y envidia; borracheras, orgías, y otras cosas parecidas. Les advierto ahora, como antes lo hice, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.” Gálatas 5:20-21, nos arremeten para el mar de las águas amargas del pecado no justificado. “En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas.” Gálatas 5:22-23. Mas como poderemos aplacar os sentimientos que las obras de la carne generan y que terminan por deijar nuestra vida amarga e pesarosa. Dios dió una estratégia para Eliseo: “Tráiganme una vasija nueva, y échenle sal —les ordenó Eliseo. Cuando se la entregaron, Eliseo fue al manantial y, arrojando allí la sal, exclamó:
—Así dice el Señor: "¡Yo purifico esta agua para que nunca más cause muerte ni esterilidad!" A partir de ese momento, y hasta el día de hoy, el agua quedó purificada, según la palabra de Eliseo.” 2 Reis 2: 20-22. Queridos plato nuevo es un lugar nuevo para se comer. Un lugar preparado para degustar un manjar, algo nunca antes degustado, una novedad. Y plato es colocado en la mesa (vea mensaje anterior - Los discípulos de caminho a Emaús - penúltimo párrafo). E que novidade a ser degustada Dios mandó Eliseo colocar em el plato: sal. Falta de sal deja las cosas insípidas: sin sabor. Entretanto una comida con sal em la cantidad cierta y bien condimentada es algo muy apetitoso. La sal acompañando la ofrenda era una ordenación de Dios: “Todas las ofrendas de cereal las sazonarán con sal, y no dejarán que les falte la sal del *pacto de su Dios. A todas las ofrendas deberán ponerles sal.” Levítico 2:13
En agronomia sabemos que ciertos sales son buenos y em la cantidad cierta llevan condiciones para las plantas crezcan saludables en la tierra por un correcto balanceamiento de nutrientes. El hombre también debe ingerir sal en cierta cantidad para complementar la dieta de sales minerales a fin de suplir las necesidades de su organismo.
A constatación hecha por Jesús para aquellos que lo seguian, sus discípulos, fué: “Üstedes son la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve insípida, ¿cómo recobrará su sabor? “ Mateus 5:13a
Todo aquel que cree em la obra redentora de Jesus y es lleno del Espírito Santo y los frutos del Espírito, y siendo capacitado por el Señor a hacer la diferencia: “Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna rama puede dar fruto por sí misma, sino que tiene que permanecer en la vid, así tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen en mí.” Juan 15:4 . El discípulo, imitador de Jesús, que es la sal del mundo y estando firmado em la vid que es Jesucristo y munido de la buena palabra de Dios al ser lanzando em la fuente de aguas amargas que por veces surge em la vida hace la diferencia en Jesús y torna la fuente de las aguas pura y renovada. Asi todo aquel que cree em Jesus puede d debe hacer la distinción em los lugares donde pisa siendo sal del mundo y luz para los gentiles.
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